Cuatro consejos para mejorar en el juego.

Estos consejos los encontré de la mano de un gran deportista, y aunque no practica capoeira, se puede aplicar perfectamente a nuestro arte, sin ir más lejos, a mí personalmente me vinieron muy bien en ciertas etapas de decaída, incluso dentro de las distintas modalidades que ejerzo.

Hoy me pongo el traje de técnico para dar cuatro consejos que te ayudan a mejorar el nivel de juego en una roda. Seguro que la mayoría de vosotros pensaréis que esto no es nada del otro mundo, pero a veces repasar y tener claros estos conceptos básicos nos pueden ayudar mucho.

Primero consejo: 

En un capoeirista principiante, y muchas veces también en los avanzados, la técnica es el elemento  que más limita su nivel de juego. Por mucho físico que tengáis y grandes ideas para moverse en una roda, sin una base técnica que nos permita llevar a la realidad esos métodos, siempre nos encontraremos limitados. Dicho lo cual, solo conozco dos formas de mejorar el nivel técnico. 

*La primera es la más obvia, pulir la técnica con un buen entrenamiento.

*La segunda vía de aprendizaje, aunque no te parezca práctica, es uno de los métodos con los que más se aprende, se trata de la observación directa o a través de videos, presta atención a los gestos técnicos de los buenos jugadores, esto también se puede aplicar en la observación directa de los compañeros o tú maestro dentro de una roda. Existen reacciones dentro de un juego que nadie te explicará jamás, mira y aprende. Particularmente fue lo que más me enseñó.

Segundo consejo: 

Hay que ser consciente del nivel que uno tiene y lo que puede llegar a desarrollar con alto porcentaje de éxito. Muchos capoeiristas se sobrevaloran e intentan jugar por encima de sus posibilidades, esto no es bueno, tened cuidado con la subida de humos, no debéis limitar vuestro avance y crecimiento futuro, pero las chulerías también sobran.

Un buen ejemplo de esto, es un suceso que me pasó cuando apenas llevaba unos años practicando capoeira. Había un compañero en mi grupo al que todos le alababan su estilo de gingar, yo traté de imitarlo durante un tiempo, hasta que un día me di cuenta, que estaba forzaba tanto mi libertad movimientos por lograr mi propósito, que había perdido la fluidez del juego que había adquirido hasta la fecha, después de esto, me impuse mi propio estilo, en el que me encontraba más cómodo y podía explotar al máximo mis cualidades. 

Tercer consejo:

Competir entre compañeros no está mal, si la competencia no es desleal y no provoca rivalidad, si no todo lo contrario. Para sacar de nosotros mismos el máximo de nuestras posibilidades, necesitamos tener objetivos. Solo conseguiremos exprimir nuestras calidades en las situaciones en las que ponemos alguna cosa en juego. Es la naturaleza humana.

Al igual que redacté anteriormente, me vuelvo a mostrar cómo ejemplo, en mi camino como capoeirista, he tenido buenos compañeros con los que he competido duramente los entrenamientos, al finalizar la clase, nos íbamos juntos a casa y comentábamos el juego que habíamos desarrollado, los fallos y lo que nos había gustado de cada uno.

Cuarto consejo:

Divertiros y disfrutad jugando. No conozco ninguna actividad humana que logremos dominar si no hay diversión y placer. Pero a la vez analizad vuestro juego, sed críticos con vosotros mismos buscando cuáles son vuestros defectos, desde los más aceptables como son los técnicos, tácticos y físicos, hasta los más difíciles de aceptar, como son los de orden psicológico. Ese tipo de jugador que siempre encuentra excusas, solo consigue limitarse al no evaluar cuáles han sido sus errores y cómo subsanarlos o minimizarlos en un futuro.